La conmoción por el doble crimen de fin de año en Concepción continua latente. El jueves a la noche, una multitudinaria marcha reclamó por las calles de la ciudad que el caso no quede impune.

El 31 de diciembre a la madrugada Leonardo Gabriel Urquiza y Daniel González fallecieron, luego de recibir disparos frente a una vivienda ubicada en Obispo Colombres y Yapeyú, en el barrio Fátima. Alejandro Porra, por su parte, fue herido.

Fuentes policiales habían informado que alrededor de las 3, un grupo de 12 a 14 personas comenzó a lanzar piedras contra la casa en la que vive un mecánico y su familia. Todo habría comenzado por una disputa entre uno de los hijos del dueño de casa y Porra.

Ante el ataque que sufría en su vivienda, el mecánico tomó una carabina y realizó disparos contra la multitud, que huyó despavorida. El fiscal de Instrucción Edgardo Sánchez había ordenado la aprehensión del hombre.

Sin embargo, fuentes de la investigación informaron que las pericias habrían hallado restos de pólvora en los dos hijos del mecánico (uno de ellos menor de edad), por lo que se investiga si ellos también efectuaron disparos.

El fiscal de Feria, Jorge Echayde, solicitó la aprehensión del hijo mayor, en tanto que el adolescente de 16 años quedó bajo tutela de su madre, por orden del juez de Menores. La conmoción es tal, que la Policía teme represalias de los familiares de las víctimas.